viernes, 20 de junio de 2014

Las rutinas diarias de los genios creativos

El día tiene 24 horas para todo el mundo, pero no todos las aprovechan de la misma manera. En el mismo periodo de tiempo en que algunos son capaces de hacer mil cosas otros apenas pueden hacer una o dos. ¿De qué manera influye la distribución del tiempo en la creatividad o, por ir más lejos, en la genialidad? Eso es precisamente lo que Mason Currey trata de averiguar en su obra Daily Rituals: How Artists Work, donde, a pesar de el nombre, ha investigado y recogido las rutinas diarias no solo de artistas sino de escritores, filósofos, científicos o matemáticos. Los hay que llegan a mantener la misma rutina con una rigidez inflexible durante décadas, mientras que otros solo la utilizan durante períodos creativos, mientras trabajan en alguna obra.

Basándose en el libro de Currey, RJ Andrews ha diseñado una curiosa infografía para Info We Trust en la que representa en forma de reloj las 24 horas de dieciséis de estos genios creativos ‒aquí traducida al español‒. Andrews ha utilizado varios colores para agrupar las distintas rutinas referidas al sueño, al trabajo, a las actividades fisiológicas, al ejercicio, al ocio o a otros menesteres menos comunes, distribuidas a lo largo del día.

De un solo vistazo podremos ver qué genios trabajan durante la noche y cuáles por el día, quiénes disponen de más tiempo libre y quiénes se ven obligados a compaginar la creación con un trabajo que les procure sustento. Algunas de esas rutinas, como no podía ser de otra manera, resultan bastante excéntricas, como por ejemplo la visita diaria de Víctor Hugo al barbero o la maratoniana sesión de escritura de Balzac durante toda la noche gracias a unas cincuenta tazas de café solo diarias. Además se acompaña de otros datos curiosos, como el detalle de que Beethoven tomarapor las mañanas sesenta granos de café exactamente en cada taza o que Víctor se despertara con el sonido de un arma de fuego.

Por cierto, si te interesa conocer más excéntricas manías creativas de escritores te recomiendo Escribir es un tic que Francesco Piccolo publicó en Ariel, con excelentes ilustraciones de Anthony Garner.
















jueves, 19 de junio de 2014

Los hábitos de sueño de los genios creativos

Los beneficios de dormir adecuadamente son innumerables. Entre ellos, según un estudio realizado por la Universidad de Notre Dame en Estados Unidos, puede ayudar a consolidar la memoria, a reorganizar la información y a extraer datos relevantes fomentando la creatividad, especialmente en el sueño profundo o en las fases de sueño MOR en que este es más intenso. Sin embargo, ¿hasta qué punto se cumple observación en las grandes mentes creativas de la historia?


Para comprobarlo la revista New York ha elaborado una infografía en donde contrasta los hábitos de sueño de 27 genios creativos de todas las disciplinas, basándose en la obra de Mason Currey Daily Rituals: How Artists Work, donde se recogen las rutinas diarias no solo de artistas sino de escritores, filósofos, científicos o matemáticos. No es la primera vez que se realiza ‒y yo la comento‒ una infografía de este tipo. Hace unos meses RJ Andrews diseñó una curiosa infografía para Info We Trust en la que representaba en forma de reloj las 24 horas de dieciséis de estos genios creativos, incluyendo, por supuesto, sus horas de sueño. En esta ocasión la lista se amplía y se centra exclusivamente en este aspecto.


A simple vista lo más normal es que se vayan a dormir entre las 21:00 y las 00:00 y que se levanten entre las 6:00 y las 8:00, con una media de sueño de unas siete u ocho horas. Llaman la atención los hábitos de Balzac, que se iba a dormir a las 18:00 de la tarde, se levantaba a la 1:00 de la noche y se pasaba toda la jornada en vela, a base de cafés ‒unas 50 al día‒, para rematarla con una pequeña siesta mañanera. Flaubert, por su parte, se va a dormir a las 3:00 de la noche y se levanta a las 10:00 de la mañana., mientras que Scott Fitzgerald se acostaba a las 3:30 y se levantaba a las 11:00. Los más dormilones Flannery O´Connor y Marina Abramovic con diez horas; los menos Freud o Nabokov con unas escasas seis horas.


miércoles, 18 de junio de 2014

Hallan una veintena de poemas inéditos de Pablo Neruda.

Más de veinte poemas inéditos del poeta chileno Pablo Neruda fueron hallados durante una revisión de los archivos del autor por parte de la Fundación Pablo Neruda, anunció hoy la editorial Seix Barral, que los publicará a finales de 2014 en Latinoamérica y principios de 2015 en España.

Según informó hoy la editorial, los poemas fueron encontrados en unas cajas que contenían los manuscritos de las obras del poeta, durante una revisión exhaustiva por parte de la Biblioteca de la Fundación Pablo Neruda, bajo la dirección de Darío Oses.

En esta revisión se comprobó que algunos poemas manuscritos de extraordinaria calidad no se habían incluido en las obras publicadas correspondientes a cada caja.

La publicación de este material inédito de Neruda, el más importante hallado hasta ahora del poeta, se hará coincidir con el 110 aniversario del nacimiento del Premio Nobel y el 90 aniversario de la publicación de “Veinte poemas de amor y una canción desesperada”.

Para Seix Barral, la certificación de la autoría de estos más de veinte poemas “los convierte en el mayor hallazgo de las letras hispanas en los últimos años, un acontecimiento literario de importancia universal”.

La relevancia de este hallazgo reside en que los poemas encontrados fueron escritos con posterioridad a “Canto general” (1950), en la época de madurez de Pablo Neruda.

Previamente, solo habían aparecido dos trabajos inéditos de Neruda: “El río invisible” (Seix Barral, 1980), que incluía poesía y prosa de juventud, y sus poemas de adolescencia, “Cuadernos de Temuco” (Seix Barral, 1996).

El poeta y académico Pere Gimferrer, que ha estado muy implicado en la publicación de estos inéditos, valora que en los nuevos poemas de Neruda hallamos “el poderío imaginativo, la desbordante plenitud expresiva y el mismo don, el apasionamiento erótico o amatorio que para la invectiva, la sátira o el mínimo detalle cotidiano convertido en poema”.

“Es decir (se encuentra) por igual el Neruda de ‘Odas elementales’ y el Neruda de ‘La Barcalora’, el de ‘Memorial de Isla Negra’ e incluso el de ‘Estravagario’”, aclara Gimferrer.

Seix Barral avanzó hoy un fragmento de un poema sin título, escrito en 1964, el año en que aparece “Memorial de Isla Negra”, la gran recapitulación poética autobiográfica de Pablo Neruda al cumplir sesenta años:

“Reposa tu pura cadera y el arco de flechas mojadas/extiende en la noche los pétalos que forman tu forma/que suban tus piernas de arcilla el silencio y su clara escalera/peldaño a peldaño volando conmigo en el sueño/yo siento que asciendes entonces al árbol sombrío que canta en la sombra/Oscura es la noche del mundo sin ti amada mía,/y apenas diviso el origen, apenas comprendo el idioma,/con dificultades descifro las hojas de los eucaliptos”.

Este poema fue encontrado en la Caja 52, que contiene materiales muy diversos. Los originales son mecanografiados y no se halló una versión manuscrita del mismo, precisó la editorial.

martes, 17 de junio de 2014

Entre los muchos libros olvidados por la historia, se encuentra esta obra maestra de la literatura fantástica, escrita por Jan Potocki. Es hora de desempolvarla.

"Desde su aparición fragmentada, el texto no ha dejado de sorprender a los aficionados a la literatura fantástica, que reconocen en él una obra maestra del género"

Desde mi secreter, como lo habrán hecho miles de escritores desaparecidos, escribo esta columna, para que puedan conocer aquellos tesoros de empastes gruesos y polvorientos que han caído en mis manos, redefiniendo mi concepción del mundo de las letras y el de las personas.


Es el caso del "Manuscrito encontrado en Zaragoza" del conde polaco Jan Potocki, intelectual que se dedicó a viajar por el mundo, plasmando sus vivencias en delirantes relatos llenos de misterio, con una considerable carga sobrenatural.


En los años 1804 y 1805, se lanzó una edición muy limitada. Desde su aparición fragmentada, el texto no ha dejado de sorprender a los aficionados a la literatura fantástica, que reconocen en él una obra maestra del género.


Estructurada como un diario y ambientada en Zaragoza, alrededor de 1715, su protagonista, Alfonso Van Worden, es un oficial de la Guardia Valona que atraviesa Sierra Morena en dirección a Madrid, donde entrará como capitán al servicio del rey de España Felipe V.


Mientras transcurre la historia, se encuentra con seres extraordinarios: hermosas brujas, siniestras princesas endemoniadas, gitanos, árabes místicos, ladrones, hombres poseídos, miembros de la Inquisición, cabalistas y personajes como el Judío Errante.


Ellos mismos se apropian del relato y cuentan sus inquietantes historias en torno a míticos lugares como la Venta Quemada, la Posada de los Alcornoques, o las orillas del Guadalquivir en Sierra Morena.


El autor es capaz de mezclar, con una habilidad extraordinaria, las historias, generando el efecto de un relato dentro de otro, lo cual termina atrapando al lector, quien difícilmente puede dejar de leer el libro hasta que acaba un episodio.


Su estructura se desarrolla constantemente en forma laberíntica, generando un clima alucinante. En la primera jornada, Potocki nos conduce sigilosamente, entre retórica y una exquisita narración, hacia una escena lésbica e incestuosa entre dos hermanas, las princesas moras Emina y Zibedea. Luego, el protagonista, tras haber gozado de la gentileza de ambas damas, despierta entre dos ahorcados, los hermanos Zoto, famosos bandidos de la región.


Los personajes van envolviendo a Alfonso Van Worden en un manto de engaños, poniendo al límite su razón y templanza, con un final, por lo menos, inesperado.


Existe también una segunda parte de este libro, que habla de la vida de Avadoro, personaje que transcurre en un devenir burgués y cortesano, casi suprimiendo la incorporación del factor fantástico, por lo cual recomiendo comenzar disfrutando la primera parte en forma detenida y analítica, ya que está cargada de símbolos y códigos insertos en la narración, lo cual lejos de volverla tediosa, la convierte en una pieza única en su género.

jueves, 5 de junio de 2014

Se descubre una ballena varada oculta en una pintura holandesa del siglo XVII


Estaba en un cuadro de Hendrick van Anthonissen en el Museo Fitzwilliam de Cambridge.

Cuando unos conservadores de arte en el Reino Unido estaban limpiando un paisaje marino holandés del siglo XVII, se encontraron con una sorpresa: una imagen de una ballena varada que había estado oculta durante al menos 150 años.

Hasta hace poco, la pintura "Vista de la playa de Scheveningen", creada por Hendrick van Anthonissen hacia 1641, mostraba simplemente grupos de personas reunidas en una playa der La Haya, en los Países Bajos.

"Parecía una pintura muy modesta que representa una escena muy tranquila de playa situada en invierno", dijo Shan Kuang, una estudiante de conservación en la Universidad de Fitzwilliam Museum de Cambridge, en un nuevo video que explica el extraño hallazgo. "Había grupos de personas reunidas. No estaba claro por qué estaban allí, pero no parecían demasiado fuera de lo normal".


Kuang fue la encargada de eliminar una capa de barniz, que se encuentra normalmente en pinturas al óleo, pero desafortunadamente amarillea con el tiempo. Cuando ella empezó a limpiar, emergió una figura en el horizonte del océano al lado de una forma que parecía una vela. Esto fue "muy peculiar e inesperado", dijo Kuang. Pero al limpiar aún más con un bisturí y disolvente reveló que la vela flotando en realidad estaba de pie encima de una ballena, y lo que al principio parecía ser una vela era en realidad la aleta de la ballena.

En el momento que fue creada la pintura hubo una oleada de interés público hacia las ballenas, dijeron los investigadores del museo, y señalaron que los registros históricos documentan un número de varamientos de ballenas en la costa de los Países Bajos en el comienzo del siglo XVII.

El Museo Fitzwilliam adquirió "Vista de la playa de Scheveningen" en 1873 cuando un donante entregó varias pinturas de paisajes holandeses. No hay ninguna indicación de que nadie en ese momento sabía que el cuadro de Van Anthonissen contó originalmente con una ballena varada. No está claro cuándo o por qué alguien decidió que la ballena tenía que desaparecer, pero un análisis de la pintura utilizada para encubrir el animal sugiere que la alteración tuvo lugar en el siglo XVIII o XIX, antes de que se donase la pintura.

"Hoy en día tratamos a las obras de arte como entidades, pero en los siglos anteriores las pinturas eran a menudo elementos de diseño interior que se adaptaban para ajustarse a ciertos espacios - o para adaptarse a los gustos cambiantes", explicó Kuang en un comunicado. "Es posible que se quitase la ballena porque la presencia de un animal muerto fue considerada ofensiva - o tal vez sin la ballena la imagen era más comercial".

La pintura está en exhibición permanente en la galería de la pintura holandesa del Siglo de Oro del Museo Fitzwilliam.

domingo, 1 de junio de 2014

Concurso Literario.

A comenzado el " Primer Concurso literario de Doctrinarios Doctos" ( Memes Doctos, La Doctrina del Saber, La Doctrina del Meme, Filosorraptor, Marciano, demasiado marciano intergaláctico y Eres todo un rojillo. (páginas de facebook)) en donde podrán concursar por publicitar en nuestras páginas a elección sus textos, esta permitido todo tipo de textos en el concurso, este esta dividido en dos categorías, adulto y adolescente (sub 18). La fecha límite de este es hasta el 30 de junio.

Texto número 2 por Gabriel Fraija

 Gabriel Fraija
16 años.
La bruma

Antes de haber fragmentado
Al mar en mares
Y al pueblo en razas.

Antes de que filudas piedras
Hubieran afilado lanzas
En sangrantes heridas.

El silencio era bruma
Y el silencio era vida.
Antes de que lo dicho se escribiera,

Había escrito
En augusta piedra
De una montaña

Que en posteriores tiempos de
Mares y de razas
Y lanzas filudas,

Alguien, cualquiera, escribiría
A los provectos tiempos
En que el silencio era bruma.

Texto número 1 por Gabriel Fraija

Gabriel Fraija
16 años.

Si, desde mi pueblo, a Meridión
Diera yo un millón de pasos
Y desde tu ciudad de asfalto
Trazaras tú otro millón
Y acogiésemos a la tormenta
Y nos bañáramos en la sequía
Sin tregua ante el verde pálido
Que mora en la agonía
Soportáramos el frío
Nos regocijáramos del hambre
Nos mofáramos del sol
Que nos bulle la sangre
Como un eco el uno del otro
Nuestros pasos compasaran
Cuyo límite no trazan la llanura,
No el río, no la montaña

Nos encontraríamos en el medio,
Seríamos tú y yo, uno, en el medio.
Si, cuando mis pasos ya sido tantos,
Sólo hubiéramos yo y el llanto
Compasaría otro millón de pasos
Hasta tu ciudad de asfalto.

"UNA GRAN ANÉCDOTA" Por Jesús Tadeo Palacios Valverde


Una gran controversia se originó directamente de la forma en cómo Einstein derivó sus ecuaciones en 1917. Su razonamiento parecía contradecir los postulados científicos preponderantes de la época, los cuales sostenían la visión de un Universo eterno, sin origen, sin final y sin movimiento de expansión o aceleración alguna. Einstein tenía dos opciones; o bien optar por la inclusión de una constante en sus ecuaciones de la Relatividad (constante cosmológica o Lambda) para que así concordasen con las teorías establecidas, o transformar radicalmente la ciencia moderna con una nueva y arriesgada visión del cosmos que, de ser expuesta, le haría objeto de crítica por parte de la comunidad científica de aquel entonces.
En  1917 un maduro Albert se hallaba aún en la soledad de su estudio. Su cuerpo sumergido en la hondonada de inquietos ademanes yacía  en medio de  innumerables apuntes, teorías, bocetos y fórmulas garabateadas con magistral entereza. Sin duda, algo sorprendente para el propio Einstein estaba por ocurrir, algo realmente extraordinario que llevaría al mundo, de saberse en aquel preciso instante, a una gran revolución en la percepción científica de principios del siglo XX: la relación universal de la materia, el tiempo y la energía.
Sin importar las vueltas que el científico le diese al asunto había algo que no cuadraba en sus razonamientos. ¿A caso el tiempo ininterrumpido dedicado a la resolución había sido producido algún desperfecto? ¿A caso la teoría de la relatividad general estaba incompleta? ¿Por qué demonios entonces no se ajustaba con las aseveraciones científicas? Podían haber sido algunas de las interrogantes que en ese instante se abalanzaron sobre la alborotada cabeza de Albert. ¿Y es que cómo es posible que una de sus más famosas teorías intuyera que el Universo presenta un movimiento acelerado en lugar de corroborar su supuesta inmutabilidad y fijeza? No, eso era impensable. El universo no podría experimentar movimiento ni aceleración alguna... Algo podía hacerse… Algo debía hacerse. Si el Universo presenta un estado que le permitiese expandirse a una velocidad determinada, la gravedad que los cuerpos presentes en el espacio experimentan entre si (galaxias, nebulosas, estrellas, astros, etc) debía bastar para ser una fuerza opositora que terminaría por neutralizar dicho estado y crear, de esa forma, una suerte de “Universo Estacionario”, un todo complejo sin inicio ni final, o al menos eso se decía.
Para resolver tal “desacierto” y concordar con el “Universo Estacionario”, Albert se vio obligado ha colocar en su ecuación una variable que solucionaría tal contradicción. Dicha variable neutralizadora fue denominada “LA CONSTANTE COSMOLÓGICA” y, literalmente, fue el artificio del cuál la teoría tuvo que valerse para lograr la tan ansiada aceptación científica en los albores del siglo XX. Paradójicamente y pasado algún tiempo, la constante que debía salvar la Teoría de la relatividad terminó siendo reconocida, por el propio físico, como uno de sus más graves “errores”… pero ¿A que se debió tal cambio?
En 1929 el nombre de Edwin Hubble era sinónimo de controversia en el campo de la astrofísica. Edwin había realizado innumerables experimentos en los cuales medía la intensidad de las ondas radio-luminiscentes que nebulosas lejanas emitían, con la finalidad de establecer el patrón de movimiento de las mismas. Su hallazgo fue considerado como uno de los más revolucionarios de la humanidad. En medio de sus averiguaciones Hubble se percató de que las nebulosas disminuían la intensidad de sus emisiones alejándose unas de otras. Esto lo llevó a la conclusión que el Universo no sólo se está expandiendo sino que en lugar de disminuir su velocidad, como podría pensarse, está aumenta más y más.
Hoy en día en el campo de la física teórica se coquetea con ideas acerca de lo que puede estar causando tal aceleración y las implicaciones que pudiera tener para el cosmos. Una misteriosa energía-masa, formada desde el Big Bang, parece intervenir directamente en este proceso. Los teóricos la han denominado ENERGÍA OSCURA, y su influencia de “llenado”, por así decirlo,  es tan grande que incluso llena los espacios atómicos que separan las masas de todo cuerpo presente en el cosmos de manera vertiginosa. Si esto es correcto se hablaría que el porcentaje total de energía oscura vendría a ser más de las tres cuartas partes del total de energía-masa del Universo. Esto es sencillamente increíble tanto para propios como para extraños porque no sólo explicaría el hecho de la aceleración de la expansión en el universo si no que también pudiera darnos una vista hacia sus consecuencias: El enfriamiento y extinción paulatino del universo o la posibilidad de un colapso atómico conocido como “BIG RIP” (el gran desgarre), debido a la energía que llena los espacios del núcleo atómico de la materia y termina por despedazarlos.
Albert estaba en lo correcto y la aceleración de la expansión del cosmos que Hubble sostenía parecía avalarlo.  Al parecer, su teoría no necesitaba de ninguna constante agregada para ser coherente y autosuficiente. Einstein se adelantó a las propias aseveraciones de su tiempo haciendo, incluso con su supuesto y mal llamado por él mismo “gran error”, que nuestra concepción y entendimiento del Universo cambien una vez más en la eterna búsqueda prometedora del conocimiento infinito.


HOJA TAMAÑO CARTA- Por Carla Retamal.

Si usted ya no me quiere debería dejar de escribirme Aunque sean cosas tontas Cosas de la tele -que antes usted no veía- Aunque sean cosas que ya no nos unen Aunque sean manchas o fotos de otros No escriba nada Una sola nota suya y es volver a los tiempos muertos Una sola carta más y le responderé Lo juro Pero no lo haré –mejor- Mantendré el silencio Mantendré mis noches intactas sólo para escribirle a usted Mantendré mi cama Mantendré el incienso Pondré dos cuchillos y dos tenedores Me seguiré el juego Todo lo que escribo en esta vida está dedicado a usted Pero usted nunca lo sabrá Quemaré mis cartas –mejor- Quemaré mis notas Quemaré el comedor Ya nada nos unirá Pondré una bomba en el balcón en el ascensor y en la puerta Volaré el edificio –mejor- No tendré nada que la recuerde.




Biografía

Carla Retamal Ramírez - Chile (1987). Poeta. Licenciada en Literatura de la Universidad Diego Portales. En la ciudad de Chillán da sus primeros pasos como poeta en el Taller Literario de Ñuble (2004). Ha participado en encuentros literarios: Poesía en el  Valle de Colchagua, Santa Cruz; del Primer Encuentro Internacional de Escritores de Artistas del  Acero, Concepción;de Grito de mujer, Talagante; de Seminario Nueva Poesía Chilena, Santiago; de Chillán Poesía, Chillán; y en diversos talleres, dirigidos por grandes poetas chilenos y extranjeros. Su obra se encuentra en diferentes antologías: Irreverencia, 2006; Letras contra el muro, 2007; Poetas de la blasfemia y otras herejías, 2008; Carnada, 2009, Ed. Universidad de Talca; Al Fin del Mundo, 2011, Ed. Mago; Señoritas en Riesgo, 2013, Ed. Moda y Pueblo y; Cinco poetas de Latinoamérica, 2014 Ed. Letras Urbanas (Argentina); como también en diversas revistas literarias. Ha sido invitada a lecturas nacionales e internacionales. En 2007, la Universidad de Talca le otorga el I°lugar de poesía, concurso Cuelga tu Poema. Actualmente vive en Santiago, donde estudia Pedagogía en Lengua Castellana, y es parte del equipo editorial del Periódico Carajo. En la ciudad de Santa Cruz, es profesora del  Taller de Poesía en la Biblioteca Municipal.

Chopin, nacionalismo a la polaca

Durante los 39 años de su corta existencia, Fryderyk Chopin nos entrgó más de 200 trabajos para piano, de los cuales, 3 de ellos están desaparecidos, 6 trabajos para piano y orquesta, pero fue en el piano dónde el genio se desenvolvió con total libertad, demostrando ser un virtuoso cómo pocos.

Retomando la idea del título, se nos hace imposible pasar por alto las más grandes obras de Chopin, cómo lo son las polonesas, mazurcas y nocturnos, Estas dos primeras son los bailes nacionales polacos, en la totalidad de estas, se ve el genio de Chopin al mezclar diferentes ritmos folclóricos nacionales y así crear piezas tanto austeras cómo elegantes. En menor medida, algunos de los nocturnos de Chopin se dejan influenciar por el ritmo sincopado de una polonesa (Es el caso del Nocturno Op. 37 No. 2) .

Para profundizar, Fryderyk Chopin abandonó Polonia en 1830, tan sólo 2 meses después estalló la insurreción de Varsovia, en contra de los zares rusos, motivo de tristeza, al estar alejado de su familia y verse imposibilitado de servir a su patria, compone el Estudio Op.10 No.12 más conocido como "El Revolucionario". De esta manera, Chopin lleva los ritmos de su lejana Polonia a los más finos salones parisinos y es aquí, donde el genio polaco establece su nuevo hogar, entre clases y pequeños conciertos en salones elité.